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México, mi
país, está poblado por ladrones. Esta es la conclusión a la que llego
cuando observo el quehacer cotidiano de la gente: todos estamos al acecho de
que alguien se descuide para hacer nuestras las cosas que se encuentren al
alcance de la mano.
Ahora está saliendo a la luz el robo de la misma por parte no solamente de los que de ella vivían, sino de los usuarios, personas "dignas" que, sin más y de una manera desfachatada, aceptan estar "colgados" y todavía se enfadan cuando no tienen el servicio...
Si en verdad se quiere que México deje de ser un país de las acciones ilegales, se debería comenzar por el principio. Se debería iniciar con la sanción correspondiente a cada acto indebido... Pero estaría la mayor parte de la población, incluidos los políticos, pagando su culpa.
Yo me siento muy decepcionada y creo que experimento una sensación de duelo por mi país. Mi madre contaba que la progenitora de una amiga de la juventud decía: "Para donde volteo, veo tus obras Señor" y yo digo: "Para donde volteo, veo tus sobras, Señor". Es que pareciera que los mexicanos fuésemos personas de ínfima clase, que no tuviéramos el carácter y la dignidad para salir adelante con nuestros propios recursos y esfuerzos.
Lo que más anhelaría sería sentirme orgullosa de mi nacionalidad, poder decir que en mi país todas las personas, desde los políticos hasta LOS MÁS SENCILLOS PERSONAJES QUE LO PUEBLAN, SON PERSONAS DECENTES.
Creo que esta es una carta de buenas intenciones, en la que expresaré un deseo intenso que, por desgracia, será irrealizable:
México es un país grande, como su extensión territorial y cálida porque toda su población se respeta y se tolera, además de que hay el compromiso de todos por mantener las buenas relaciones sociales. Es un pueblo progresista porque se ha invertido mucho en su educación y sus profesores, directivos y representantes son personas intachables en lo profesional y personal. La ciencia ha avanzado enormemente y ahora México es un país productor de ciencia y tecnología, lo que lo coloca en un lugar preponderante a nivel mundial.
Lo anterior no es sólo sino una ilusión y un deseo que nunca se realizará.
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